Actualidad

El CCAD trata a más de 300 pacientes en 4 años y realiza más de 1.000 asistencias en 2012

0

El Centro Comarcal de Atención a la Drogodependencia, ubicado en Palos, ha atendido, desde su puesta en marcha en 2008, a 310 pacientes de la zona de Palos, Moguer y Mazagón. En 2012 el centro ha realizado más de 1.000 asistencias. Este es el balance que se ha hecho desde la concejalía de Asuntos Sociales del Ayuntamiento palermo que quiere recordar a los vecinos que tienen a su disposición este servicio público.

En este centro, que cuenta con tres profesionales, una médico, una trabajadora social y una psicóloga, se le ofrece una atención integral a todas aquellas personas que tengan problemas con el alcohol, la cocaína, el cannabis, o los juegos patológicos, entre otras adicciones.

El Centro, que pertenece a la red andaluza de sanidad, trabaja en coordinación con otros centros comarcales, comunidades terapéuticas, viviendas de apoyo a tratamiento, centros de día, etc.

Según la médica del centro, Miriam Álvarez, la drogodependencia es una enfermedad mental que requiere de tratamiento médico, apoyo psicológico y ayuda social por lo que los tratamientos son largos y necesitan de la implicación de distintos profesionales y el entorno familiar.

La profesional además, ha matizado que el problema de la drogodependencia se está incrementando en los últimos años por la situación de crisis que vivimos y por un aumento considerable del consumo de carnabis en adolescentes. “Por esa razón el centro está atendiendo especialmente a este segmento de la población y está trabajando con mucho ahínco en la prevención”, matizaba Álvarez.

Desde este servicio público sus profesionales han mandado un mensaje a los potenciales pacientes de este centro “que vengan y no tengan pudor” y a las familias “que estén muy atentas y que no tapen”. Es fundamental descubrir a tiempo la enfermedad para poder atajarla cuanto antes.

Según la médica del centro, “la irritabilidad, la apatía y los cambios de humor en los adolescentes deben ser señales de aviso para su familia porque casi siempre escoden un consumo”.

Miriam Álvarez ha recordado a las familias que “lo normal” en jóvenes entre 14 y 18 años es que “ni consuman alcohol ni fumen porros”.

San Juan levanta su voz contra la violencia de género

Artículo anterior

El San Roque se propone acabar su mala racha, contra el Villanovense

Artículo siguiente

También te puede interesar

Más de Actualidad