Espectacular jornada para el San Roque de Lepe, que aparte de ganar su partido ante el Melilla, en lo que fue el choque de la jornada en Segunda B, le acompañaron el resto de resultados porque ninguno de los de arriba fueron capaces de ganar.
Así el asunto, el equipo de Lobera se instala en la tercera posición de la tabla, sólo superado por Murcia y Sevilla Atlético, con seis y tres puntos de diferencia, respectivamente.
Se cae del pedestal el Cádiz, que palmó en la Victoria ante el Jaén y, al no pasar del empate el Ceuta en el Murube ante el Écija, próximo rival del San Roque, el camino se ha allanado para un equipo auriengro que ahora mismo y, a pesar de las carencias de efectivos, se abre un horizonte pintado de grandeza, aunque nadie quiere tirar las patas por alto porque aún resta mucha Liga.
El partido ante el Écija del próximo fin de semana volverá a ser clave para el San Roque, en el ánimo de aseverar su protagonismo en la Liga.
Superado el periodo navideño, comienzan a aflorar los problemas para algunos equipos de la categoría. Así el panorama, El Polideportivo Ejido ha amenazado con no presentarse la próxima jornada si no cobran antes los jugadores. En la misma situación está el Estepona, que ha amenazado con la misma medida.
No respira el Jaén y es posible que en las próximas fechas se conozcan más casos de impagos a algunas plantilla. Así que todo puede cambiar de un momento a otro y el que tenga todo al día o casi, saldrá beneficiado por al final lo económico repercutirá en lo deportivo.
La ausencia de Gabri, a prueba en el Chalton inglés, provocó que Fernando, flamante fichaje del San Roque, debutase ante el Melilla y el delantero de Pilas no pudo tener mejor bautismo. Marcó el primer tanto de su equipo y contribuyó al triunfo de forma decisiva con un excelente trabajo en la punta del ataque.
El sevillano llegó a Lepe con la carta de libertad del Jaén y curiosamente no había marcado en lo que va de temporada. Ha sido llegar a Lepe y besar el santo.
