En la noche del sábado, Isla Cristina revivió su espíritu carnavalero con un espectacular Desfile de Carrozas y Grupos Carnavaleros en una Cabalgata que deslumbró y asombró a propios y extraños. La “jornada carnavalera” ha sido una iniciativa de la Concejalía de Festejos del Ayuntamiento isleño, la Federación Isleña de Peñas y Asociaciones Carnavaleras (FIPAC) y Asociación de Carnavaleros Isleños (ACI).
Un total de 7 carrozas, entre las que destacaban las de las Cortes de Honor, infantil y juvenil de este mismo año, “20.000 leguas de viaje submarino” o la de la Asociación “Miércoles de Ceniza”, volvieron a pisar las calles isleñas después del carnaval de febrero. A éstas, les acompañaban, a pie, las Reinas y sus Cortes de Honor de 2010 y 2011 y diez grupos, entre humorísticos y artísticos, de las diferentes peñas y asociaciones carnavaleras. Abría el cortejo un “singular” Pau Gasol como “abanderado” de toda la comitiva.
1.500 disfraces, de todos los tipos, colores y temas que fueron muy aplaudidos, tanto por isleños como por turistas nacionales y extranjeros, los cuales, cámaras en ristre, no dejaron de inmortalizar tanto ingenio y colorido.
La Cabalgata de Disfraces partió desde la Avenida Arquitecto Aramburu Mácua y tras desfilar durante tres horas, llegaron hasta las puertas del Recinto Ferial “El Carmen”, del Parque Central isleño, donde se vivió la segunda parte de la excepcional jornada carnavalera.
Siete agrupaciones, entre comparsas y murgas, además del cuarteto, hicieron las delicias de un público entregado que aplaudió cada una de las actuaciones y llenó el recinto. A ritmo de caja y bombo, algo normal en Isla Cristina durante el mes de febrero pero curioso oírlo en julio, resonó durante varias horas de la noche y hasta bien entrada la madrugada.
Para la responsable municipal, la Teniente Alcalde y Concejala de Festejos y Ocio, Isabel López, quién dirigió la compleja organización desde dentro de la cabalgata, disfrazada con su peña, dijo estar emocionada y muy satisfecha al ver el poder de convocatoria, “siempre me lo esperé de mi Pueblo, pero verlo me ha emocionado”. Además de vaticinar que “el año que viene, estoy segura, muchos más grupos y disfraces individuales se sumarán a esta iniciativa que estrenamos este verano”.
El objetivo, tanto del Ayuntamiento, FIPAC y ACI se ha cumplido con creces, mostrar al turista e isleño que vive fuera de la localidad y que viene en verano a descansar, una muestra de lo que se vive en el gran Carnaval isleño de febrero, a la vez de ser una herramienta más para desestacionalizar el turismo de invierno e incentivar la economía local, hecho éste último que, a buen seguro, se habrá conseguido a la vista de la gran afluencia de público que ha “movido” el evento y comprobar cómo de repletas se encontraban las terrazas de los diferentes establecimientos de hostelería.
