A día de hoy, la entidad aurinegra le debe dos meses a la plantilla, con la posibilidad de que esta deuda aumente a tres si de aquí a diez días no reciben notificación alguna del banco. La situación está tensa a nivel deportivo e institucional, y esta no ayuda en la orden que maneja la dirección deportiva: traer más jugadores. Son ya varios futbolistas los que se han interesado por la situación del club y muchos de ellos han dado media vuelta al ver la poca estabilidad que circula por los alrededores del Ciudad de Lepe.
Según comentan fuentes cercanas a la familia Gaitán, al menos una mensualidad llegará antes del jueves, para así poder calmar el malestar del vestuario, aunque no se sabe a día de hoy si en las próximas semanas se llegará a tener el débito con los jugadores a cero. Esta situación también se extrapola a algunos trabajadores.
La urgencia por pagar al menos un mes de la adeudado viene dada por una normativa de la federación que advierte que cualquier jugador al que le deban tres meses de contrato queda directamente libre, por lo que los jugadores aurinegros podrían salir en estampida de la disciplina lepera sin miramiento alguno.
Malas sensaciones para un CD San Roque de Lepe que está a cuatro puntos de la zona de descenso y que desde el comienzo del año 2019, con tres jornadas ya disputadas, no conoce el sabor de la victoria, ni del empate.
