El obispo de la Diócesis de Huelva, José Vilaplana, ofició este sábado el funeral por el eterno descanso del presidente y fundador de la Asociación de Obras Cristianas, el sacerdote Diego Suárez Mora, en la iglesia de Santiago Apóstol de Gibraleón.
Posteriormente, el féretro fue llevado a hombros para visitar las iglesias de San Juan y El Carmen, tras lo que fue trasladado hasta el cementerio municipal, donde ya reposan sus restos mortales.
Suárez Mora, que fue párroco de la localidad olontense durante unos cuarenta años, falleció en la mañana del viernes tras una larga enfermedad.
La noticia fue recibida con la lógica consternación por parte de la población, que se ha volcado tanto en el sepelio como en el funeral.
‘Don Diego’, como se le conoce popular y cariñosamente en Gibraleón, ya descansa en la capilla del camposanto olontense, rodeado de un mar de flores en forma de coronas provenientes de numerosas instituciones y personas tanto de esta localidad como de la vecina Beas, en la que nació hace 74 años.
Gibraleón se volcó en su adiós al excura párroco Diego Suárez Mora
