Una venganza parece ser la causa del destrozo de 750 olivos en Gibraleón. Ute Silverio, la damnificada, ofrece una recompensa de 10.000 euros para la persona que le ofrezca información sobre el autor o autores del hecho.
El litigio que mantiene Ute Silverio con unos vecinos ha llevado a la propietaria de la finca Valdetrenes a presentar una denuncia contra el alcalde de Gibraleón, Juan Serrato, por un presunto delito de prevaricación, de la que la Alcaldía dice no tener constancia.
La querellante ha denunciado en varias ocasiones que en una parcela colindante a la suya, se ha venido desarrollando un negocio industrial dedicado al almacenamiento, movimiento de tierras y transporte de mercancías en una zona calificada como suelo rústico no urbanizable.
La demandante ha venido sufriendo amenazas de algunas personas de las que dice tener pruebas videográficas. A este respecto, Silverio recibió una advertencia de la Agencia Española de Protección de Datos, en la que instaba a la mujer a retirar la cámara de seguridad instalada en torno a la casa que habita en la finca. Ella se niega a hacerlo al argumentar que quedaría desprotegida.
El caso es que los daños sufridos están valorados en unos 30.000 euros y Silverio ha manifestado que llegará hasta el final para conocer a los autores del destrozos de olivos que ha sufrido su finca.
