El Club Deportivo Pozo del Camino ha renunciado a competir la próxima temporada. Aunque la entidad se mantiene como tal, al menos de momento, no tendrá equipo ni en Regional Preferente, división a la que pertenece, ni en ninguna otra categoría. La razón principal es el desmantelamiento de la plantilla y del cuerpo de dirigentes.
Por efecto dominó, el Isla Cristina, que ha surtido de efectivos a la plantilla del Ayamonte, ha tirado de jugadores del Pozo. Además, la existencia de un tercer equipo en la localidad isleña, la Punta del Caimán, hace inviable la configuración de un grupo de garantías para plantar cara a los rivales.
También se han marchado el alma mater del club, Eduardo Neto, el presidente, Manuel María, y el entrenador, Ismael Rivero. En estas circunstancias, el Pozo se ha visto obligado a replantearse sus planes iniciales, que eran los de volver a jugar en Preferente con un nuevo proyecto de permanencia.
En una situación similar se encuentra el Atlético Villablanca, aunque por un motivo distinto. El equipo revelación la pasada temporada en Regional Preferente se siente desamparado sin el apoyo institucional y tampoco jugará. Su ya exentrenador, además, está al frente del Cartaya. Se trata de Víctor Rúa.
La Federación Andaluza de Fútbol y la Delegación Onubense deben pronunciarse ahora sobre estas vacantes y el descenso voluntario del Isla Cristina. Mantener el número actuar o ampliarlo para que la Liga vuelva a tener 20 integrantes son las opciones. En este último caso, el Punta Umbría tendría la oportunidad de ascender en los despachos, al igual que El Repilado. Fueron los mejores terceros en Provincial.
