El San Roque tiene garantizada una tercera campaña consecutiva en la Segunda División B. Igualará así su mejor racha en la categoría, a no ser que logre el ascenso. El primer objetivo de la temporada está conseguido. Los méritos del conjunto de Luis García Tevenet durante el campeonato elevaron las expectativas durante la primera vuelta, aún vigentes, dentro de un proyecto orientado a impulsar a jugadores. La reestructuración de la plantilla en el pasado de invierno, sin embargo, hicieron mirar a la parte baja de la clasificación para cubrir la primera necesidad.
El triunfo en la última jornada y los tres puntos que sumará el San Roque este fin de semana sin jugar por la retirada del Sporting Villanueva proporcionan a los aurinegros 45 puntos. Con esta cifra, la salvación está asegurada según todos los precedentes en la categoría desde la temporada 1995-96, cuando quedó instaurado el formato de competición de tres puntos por victoria. En los 16 antecedentes, el techo está en los 44 puntos que sumó el Ejido antes de bajar a Tercera División.
Con la puntuación actual, los de Luis García Tevenet evitan, incluso la promoción de descenso de forma oficiosa. Los 50 puntos con los que promocionó el Roquetas hace tres temporadas no son una referencia por su carácter extraordinario. En la campaña 2000-01 también hubo retirada, la del Poli Almería y se necesitaron 40 puntos para evitar el descenso y 42 para salvar la promoción.
En estas circunstancias, el San Roque puede volcarse en apurar todas sus posibilidades de disputar la fase de ascenso a Segunda A. El equipo lepero tiene 13 encuentros por delante para buscar una de las cuatro primeras plazas, de las que está a tiro de piedra. Se encuentra a un solo punto del Betis B, que es cuarto. El filial verdiblanco será, precisamente, el próximo rival de los aurinegros en la Liga.
