Un gol de penalti en el 82 de partido, una pena máxima que sólo vio el árbitro, Moreno Díaz, una calamidad en toda regla, le costó la derrota al Ayamonte ante el Algeciras, dentro de un partido de alto voltaje que se encargó de torcer el trencilla con sus polémicas decisiones, ya que al ficticio penalti, hay que sumar un gol anulado a Puntas, que según el árbitro se ayudó con la mano, y además le costó la expulsión al delantero, por lo que el tramo final fue un calvario para un equipo fronterizo que no mereció en ningún momento la derrota.
Amaneció el partido en la dinámica de la ida y la vuelta, con los dos equipos buscando insistentemente la portaría contraria a través del fútbol, que ya tiene mérito en un terreno de juego como el del Ciudad de Ayamonte. Justo así hasta que Guarte, a través de un golpe franco directo, la enchufó por la escuadra. Minuto 19 de partido.
El tanto impulsó al equipo fronterizo, que se adueñó del centro del campo y se gustó en casi todas sus acciones atacantes. No acabó de concretar y el empate llegó en el 37 de juego, después de un cabezazo de Mario, a la salida de un córner, que sorprendió al meta Rosa.
Todo se desató en la segunda mitad, con clara intervención del colegiado, que lo condicionó todo con sus decisiones. Primero con la expulsión de Puntas y el tanto anulado, y luego con un inexistente penalti que alteró al público y se cargó las ilusiones de un Ayamonte que hasta el final lo intentó con todas sus fuerzas, sin resultado, porque el Algeciras se atrincheró y no dejó resquicio alguno para el empate.
