El partido entre el Ayamonte y el Arcos programado para este sábado a las 16.00 horas se jugará finalmente, salvo nuevo giro en la situación del club fronterizo. Los jugadores no cobrarán ninguna mensualidad antes del encuentro, requisito fijado por el vestuario en un primer momento, pero los cambios en el órgano rector motivan una nueva medida de gracia.
El grueso de la plantilla está dispuesto a escuchar los planes de la junta gestora que ha tomado las riendas de la entidad después de la dimisión del ya expresidente Juan Morales, oficial desde el miércoles. Finalmente no retiró al equipo de la competición antes de marcharse. Había amenazado con ello.
Compañeros de Morales en la directiva de los tres últimos años y exmandatarios del club han formado un grupo de trabajo para tratar de salvar la situación extrema en la Puerta de España.
El presidente saliente ha desvelado que la deuda total del Ayamonte sobrepasa los 60.000 euros. Los jugadores están dispuestos a negociar un nuevo plan de pagos con los nuevos mandatarios. De un posible acuerdo dependerá que el equipo rojillo siga compitiendo después de esta semana.
En cualquier caso, varios jugadores ya han decidido marcharse. El máximo goleador del conjunto fronterizo, Canito, está a un paso de La Palma. En estas circunstancias y teniendo en cuenta que se pueden producir más bajas en los próximos días, Manuel Suárez Revidiego, necesita reclutar a otros jugadores para equilibrar de nuevo la plantilla y tratar de lograr la permanencia en el grupo X de Tercera.
Una junta gestora se hace cargo del Ayamonte
