La Hermandad del Rocío de Cartaya volvió a la localidad costera este miércoles, 12 de junio, exactamente siete días después de que partiera rumbo a la aldea almonteña para celebrar la Romería 2019 arropada por más de un millar de personas.
En esta ocasión, el pueblo de Cartaya volvió a echarse a las calles para recibir al simpecado cartayero y a los cientos de peregrinos que, en una mezcla de tristeza, alegría y emoción regresaban a su pueblo tras el que ha sido su segundo Rocío en solitario.
Pasadas las 21:30h, el tamborilero anunciaba la llegada de la comitiva a la Avenida de El Rompido para, segundos después, vivir una explosión de júbilo y aplausos de reconocimiento en La Pila, donde se realizó el tradicional rezo de la salve ante el monumento en honor a San Isidro Labrador, Patrón de los Agricultores.
Ya en la Plaza Redonda, el simpecado y la junta directiva, despidieron a las carruajes que, durante la última semana, han acompañado a la Hermandad en una Romería 2019 donde la filial cartayera ha dado mucho que hablar.
Acto seguido, a las puertas de la Parroquia del Apóstol San Pedro, con la presencia del cura Párroco de la localidad, Manuel Domínguez Lepe, la presidenta de la Hermandad del Rocío de Cartaya, Consolación Palacios, la Hermana Mayor, Elena Pérez, y cientos de vecinos, se procedió a la bendición de los niños ante el simpecado.
A pesar de ser una de las hermandades filiales de más reciente nombramiento, la Hermandad del Rocío de Cartaya cuenta con una de las comitivas más numerosas de la provincia de Huelva entre peregrinos a pie, a caballo y en carruajes.
