Con motivo del cincuentenario de la Romería de la Virgen de la Bella y en días previos a su festividad, ayer tuvo lugar en la Iglesia Santo Domingo de Guzmán de Lepe una bajada extraordinaria de la Virgen. La patrona de los leperos estuvo expuesta en la puerta del Camarín durante toda la jornada.
Los miembros de la Muy Ilustre Fervorosa y Franciscana Hermandad de Nuestra Señora de la Bella estuvieron custodiando a la imagen en horario de diez de la mañana a dos de la tarde y de seis de la tarde a once de la noche. Su Hermano Mayor, Jose Manuel Rodríguez Lagos, se ha mostrado muy satisfecho por las numerosas visitas recibidas pese a haber sido un caluroso domingo de agosto.
Cientos de devotos se acercaron a visitar a la Virgen, que lucía engalanada con joyas en el pedestal del 150 Aniversario de su llegada al pueblo, frente a un pórtico con terciopelo rojo y rodeada de flores.
Al final del día, los hermanos entonaron la salve y subieron a la Virgen al Camarín, donde se encuentra a la espera del 7 de agosto, día en que la bajarán para llevarla de nuevo al altar mayor de la parroquia. La Virgen de la Bella de manera extraordinaria seguirá presidiendo el altar mayor una vez acabadas las fiestas patronales hasta la romería de 2016.
