Niños y adultos de Gibraleón comenzaron ya a festejar el pasado viernes la fiesta de Halloween con un encuentro que tuvo un amplio poder de convocatoria. A las cinco y media de la tarde comenzaban a llegar los primeros pequeños con sus papás y abuelos. En la mayoría de los casos, los niños y niñas acudieron enfundados en disfraces que tenían un denominador común: el miedo.
Vampiros, brujas y todo tipo pequeños monstruos fueron desfilando por el poabellón municipal situado en el entorno del auditorio municipal.
Una de las madres que acudió a la fiesta fue Mari Carmen, quien comentaba que ver la alegría con la que participaban los pequeños en esta fiesta era lo que la había empujado a participar en este evento.
Esta madre también destacó que desde la Ampa del colegio se había organizado la fiesta.
Otra de las madres que acudió con su hijo explicaba los motivos por los que había acudido a esta terrorífica cita.
En definitiva, que niños y adultos pasaron un agradable rato de convivencia en esta fiesta importada y que cada vez parece que gana más adeptos.
