El Recreativo ha ofrecido una imagen bochornosa en el Álvarez Claro. La falta de entrega, de ganas, de intensidad y de ideas explican el 3-0 ya antes del descanso. Fue el marcador final. En esa primera parte vieron la roja directa Edu Moya y Aitor Brioso.
El primer periodo fue todo un esperpento y la segunda mitad pareció un partido de solteros contra casados. Los locales salieron al partido siendo penúltimos y acabaron fuera de puestos de descenso. El Decano llega a la cita contra el San Roque después de tres partidos sin ganar y en una situación deportiva e institucional caótica.
El técnico Alejandro Ceballos dio entrada en Melilla a Ale Zambrano y Cristian Fernández, dos novedades respecto al choque anterior frente al Murcia. Manu Molina y Waldo se cayeron del once.
El partido no pudo empezar peor. En el primer minuto, un error garrafal de la defensa recreativista permitió a Manolo, sólo dentro del área pequeña, que adelantara a los melillenses. Minutos de sufrimiento del Recreativo que fue un equipo a merced del desparpajo de los locales en los primeros minutos. Un lanzamiento de David Sánchez a la barrera y una jugada de Chupe por banda izquierda sembraron más dudas a los albiazules.
No llegaba ningún síntoma de reacción y el segundo tanto llegó. Diego Cascón disparó con el alma desde fuera del área, el tiro se envenenó y Rubén Gálvez no pudo despejar. El Recreativo parecía arrastrarse por el campo Álvarez Claro. La defensa era un coladero y el centro del campo y la delantera no existió. Sin ganas, sin intensidad y dando imagen de mediocridad.
Ya el choque acabó de complicarse cuando Edu Moya fue expulsado con roja directa por una acción antideportiva con Cascón. Y nada fue a mejor. A falta de pocos minutos para el descanso, Aitor Brioso derribó a Cascón dentro del área tras un error de Rubén Gálvez, el colegiado Muñoz Mayordomo pitó penalti y expulsó al canterano recreativista. David Sánchez transformó la pena máxima.
La segunda mitad pareció más a un entrenamiento que a un partido de Segunda división B. El Melilla se limitó a estar ordenado y bajo dos marchas para no hacer más sangre a los albiazules. Ceballos metió a Manu Molina por el amonestado Ale Zambrano y Rubén Mesa por Cristian Fernández. Nada cambió.
La primera ocasión de peligro del Decano llegó pasados los 60 minutos de partido con un disparo de Arthuro. Núñez también falló otra oportunidad casi bajo palos. Los locales se llevaron una pitada de su afición al dejar de presionar y de llegar a la meta recreativista.
Siguieron pasando minutos de angustia y no pasó nada más. Derrota por 3-0, dos bajas por expulsión para el próximo partido ante el San Roque y partido para olvidar.
FICHA TÉCNICA:
MELILLA, 3: Dani Barrio; Pepe, Bolaños, Mahanan, Richi; Nando, David Sánchez; Chupi, Hamin (Borja, 67′), Cascón (Pendu, 84′); y Manolo (Koeman, 62′).
RECREATIVO, 0: Rubén Gálvez; Aitor Brioso, Edu Moya, Carlos Delgado, Mica Pinto; Ale Zambrano (Manu Molina, 46′) Jesús Vázquez; Núñez, Dani Molina (Antonio Domínguez, 73′), Cristian Fernández (Rubén Mesa, 62′); y Arthuro.
GOLES: 1-0 (1′), Manolo; 2-0 (14′), Cascón. 3-0 (44′), David Sánchez (p.).
ÁRBITRO: Jesús Muñoz Mayordomo (C. Castellano-manchego). Expulsados con roja directa los jugadores del Recre Edu Moya (25′) y a Aitor Brioso (43′). Amonestó a los locales Pepe y Richi y a los visitantes Ale Zambrano, Núñez y Carlos Delgado.
INCIDENCIAS: Partido correspondiente de la 17ª jornada de Liga en el campo Municipal Álvarez Claro.
