Deportes

El Recreativo se despide en pie y con orgullo de la Copa del Rey (2-3)

0

En 2003, el Recreativo protagonizó una de las paginas doradas de su historia. En semifinales de Copa del Rey apeaba a Osasuna para meterse en su primera, y única, final de Copa Rey. En la noche de ayer, 17 años después y en un contexto muy distinto con más penurias que alegrías en el purgatorio de la Segunda B, el Recre se citaba con Osasuna y, en un partido en el que vio como le remontaron un 2-0, dijo adiós con orgullo y en pie a la Copa del Rey.

Para este choque, Monteagudo revolucionó su once, haciendo seis cambios respecto al equipo que jugó hace dos días ante el Talavera. Así, volvió Alex Lazaro a la portería, dio entrada al canterano Ponce en el doble pivote con Quique Rivero, desplazando así a Diego Jimenez al lateral izquierdo, completando Morcillo y Borja Garcia la defensa con Cera en el lateral derecho. Después, Irizo, siendo novedad su titularidad, Isi Ros y Victor Barroso completaron la linea de tres con Quiles como hombre más adelantado.

Los primeros minutos transcurrieron sin ninguna novedad hasta que Quiles bajó con éxito un envío en largo de Quique Rivero y en afrontar enganchó un tiro a media vuelta que Juan Pérez desvió a córner. Un saque de esquina que acabó con un latigazo de media distancia de Quique Rivero que se fue alto por la escuadra de Juan Perez.

El Recre, poco a poco, seguía creciendo y Víctor Barroso, una de las novedades, lo intentó con una falta en el lateral del área al primer palo que mando la zaga rojilla a córner y después con un centro chut que se fue alto.

Barroso demostró nuevamente su calidad a balón parado con un córner que remato Morcillo, tocando en ultima instancia el portero para mandar a corner. Un saque de esquina que acabaría siendo el 1-0. El saque de esquina acabó en el corazón del área y Morcillo, que aprovechó la bisoñé de una zaga dubitativa, adelantó al Decano en el minuto 12. Un gol merecido viendo los merecimientos que estaba haciendo un Recreativo que empezó mostrando nuevamente, la cara de la Copa del Rey, la de un equipo muy competitivo y con garra.

El tanto despertó a Osasuna que empezó a cercar la meta de Alex Lazaro y tuvo muy cerca la igualada con un trallazo de Iñigo Perez desde 40 metros que se fue por poco pro arriba del larguero de Alex Lázaro.

Pasada la media hora, el Recre seguía bien plantando, creando mucho peligro desde los corners, ante un Osasuna muy blando y contemplativo en el que brillaba únicamente Roberto Torres y que que se estiro un poco pero sin poner en muchos aprietos a Alex Lazaro.

La poca afición congregada bajo el manto negro y la gélida noche del Colombino no se creía la primera parte del Recre que la cerraría de la mejor forma posible, nuevamente, a balón parado. Un remate de Morcillo, tras un saque de esquina de Víctor Barroso, acabó con un despeje fallido de Juan Perez que acabó con Roncaglia introduciéndose el balón en propia meta.

Osasuna tenía que cambiar mucho la cara ofrecida en el primer tiempo y desde el comienzo de la segunda mitad empezó a demostrar que había salido con otros brios, encerrando a un Recre cuyo plan tenía que ser replegarse bien y aprovecha un contraataque y los espacios que podía dejar los de Jagoba Arrasate a sus espaldas.

Arrasate no lo veía claro y realizó un triple cambio de golpe, dando entrada a Darko Brasanac, Nacho Vidal y Chimy Avila por Rober Ibañez, Zabarte y Juan Villar. Precisamente, el Chimi Avila tuvo la primera oportunidad pero su disparo se marcho alto. Después, un centro de Nacho Vidal desde la banda derecha que Marc Cardona, en boca de gol, mando de forma incomprensible por linea de fondo.

Isi Ros, una vez más, dejó muestras de ser un jugador superlativo y una gran cabalgada suya por banda izquierda pero su disparo lo mandó a saque de esquina Juan Perez.

Sin embargo, el impetu de Osasuna, que tenía que ir con todo a seguir con vida, encontró un hilo de esperanza con el tanto de Brasanac de cabeza a catorce minutos del final.

El gol metió a Osasuna al Recre en su área que tenia que resistir de forma estoica y encontró en Alex Lazaro a su salvador. El gaditano paró un peligroso tiro de Estupiñan y después, salvo por partida doble al Recreativo con sendos disparos de Marc Cardona. El acoso y derribo de Osasuna se tradujo, en el 83’ en el 2-2, obra de Chimy Ávila. Un tanto con polémica ya que podía haber cometido falta sobre Morcillo y que devolvía el choque al punto de partida. Desde ahi hasta el final del choque, el Recre se defendió cual gato panza arriba, acabando el choque con el 2-2 y, de nuevo, otra prorroga copera en el Colombino.

En el tiempo extra, el Osasuna empezó asustando con un saque de esquina pero el cabezazo de Unai Garcia acabó yéndose por linea de fondo. Iñigo Pérez, con una falta lateral, tuvo cerca el 2-3 pero Alex Lazaro saco unas manos prodigiosas. Estupiñan, uno de los más activos de Osasuna, era una pesadilla por banda derecha pero el ecuatoriano fallaba en las ultimas decisiones, como un centro raso que no encontró destinatario.

Kike Borja tuvo el 2-3 pero Alex Lázaro sacó una manopla vital para seguir dejando al Recre con vida. Chuli tuvo el 3-2 tras una gran jugada entre Ponce y Quique Rivero que acabó con un disparo al muñeco del onubense pero, finalmente, en el minuto 111, Iñigo Perez consumo la remontada con un zurdazo desde la frontal, para alegría de una Huelva con el corazón roto por ver a su Decano despedirse del torneo copero pero con el orgullo mostrado a toda España, el aplauso unánime del Colombino y la buena sensación de haber dejado una gran imagen en la Copa del Rey 2019/2020.

Islantilla acomete obras de mejora de asfaltado y labores de desbroce

Artículo anterior

Fecha límite para el CD San Roque de Lepe: 31 de enero

Artículo siguiente

También te puede interesar

Más de Deportes