Los alumnos de la Escuela de Hostelería de Islantilla, en Huelva, han informado este sábado de que el delegado territorial de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Vicente Zarza, se ha comprometido a pagar a los profesores del centro «dos de las tres nóminas atrasadas», todo ello durante la reunión que han mantenido las partes este viernes para analizar la situación por la que atraviesa el centro de formación hostelera.
Desde el alumnado han indicado también que el Gobierno andaluz firmará este lunes o martes la resolución por la que, según han explicado, «se acepta el inicio del curso y, tras acudir un inspector a las instalaciones, se homologa el centro para impartir clases, y así poder avanzar en la formación».
Así, han apuntado que la Junta de Andalucía pagará a los profesores de la Escuela de Hostelería «dos meses de sueldo de los tres que se les adeuda», así como se ha comprometido a que «no vuelva a pasar» esta situación de impago de nóminas.
No obstante, «todo lo demás sigue igual», ya que como «no salía la orden del Ejecutivo andaluz, el director por su cuenta nos ha mandado de prácticas para quitarnos de en medio», han asegurado desde el alumnado, que han criticado además que estas prácticas sean «sólo por un total de 80 horas –13 días–«, cuando «cualquiera sabe que en ese tiempo lo único que haces es habituarte a la cocina, y para entonces, ya te tienes que ir». «Lo normal son tres meses, unas 300 horas», han precisado.
Del mismo modo, han advertido de que «están sin dinero, sin género, y de repente, sí hay dinero para pagar el seguro y mandarles de prácticas». A juicio de los alumnos, lo que han intentado es «escurrir el bulto, pero no se han querido mojar, ni han dado soluciones».
Es por ello que han anunciado que el próximo día 4 de abril se manifestarán en Sevilla, probablemente en compañía de los alumnos de Cádiz, partiendo el itinerario de la manifestación a las 11,00 horas desde el Puente del Cristo de la Expiración hasta desembocar en el Palacio de San Telmo, atravesando el Paseo de Colón.
Por su parte, según han señalado las mismas fuentes, los profesores «están indignados» y «tomarán medidas más drásticas». Y es que, como han subrayado los alumnos, «las cosas que se han cocinado en la escuela la mayoría las han pagado los profesores de sus bolsillos». Por tanto, «si no cobran, no van a dar clases en el centro», han añadido, algo que «entienden y apoyan los estudiantes».
