La alcaldesa de Gibraleón, Lourdes Martín, ha negado hoy que haya habido irregularidad alguna en el proceso administrativo seguido en el Ayuntamiento para nombrar al jefe de la Policía Local, nombramiento por el que está siendo investigada judicialmente.
En declaraciones a los periodistas, Martín ha asegurado que está «muy tranquila» y ha incidido en que «el procedimiento administrativo que se ha seguido para este proceso es idéntico al que se siguió en las cuatro veces anteriores, cada vez que hay cambio de Alcaldía cada alcalde decide dentro de quienes cumplen con los requisitos quién puede ser la persona responsable de la Policía Local y así se ha hecho».
En este caso, ha explicado, había tres policías que podían ser nombrados jefe, uno de baja y otro presentó su renuncia, por lo que optó por el que estaba disponible.
Ha precisado que el renunció fue precisamente el que presentó la denuncia que ha dado pie a la investigación judicial, José Ramón Borrero: «Se acercó al concejal de Seguridad Ciudadana, le entregó las llaves y la tarjeta del móvil y se abrieron diligencias por estos hechos, entendiendo que verbalmente presentaba su renuncia», algo que esta persona niega.
La alcaldesa está siendo investigada por presuntos delitos de prevaricación, tráfico influencias y falsedad documental y ha sido llamada a declarar por el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva el próximo 23 de noviembre.
