La marchadora lepera Laura García-Caro, que ha debutado este viernes en Pekín en un Campeonato del Mundo con un puesto 32, cree que la cita mundialista le viene aún «un poquito grande», pero confía en que la experiencia le sirva para «hacerlo mejor en unos años».
García-Caro, de 20 años, ha completado los 20 kilómetros en una hora, 36 minutos y 22 segundos. Al finalizar la carrera ha confesado que su resultado no era el que esperaba, aunque ha declarado: «Estoy contenta por haber finalizado en un Mundial».
«Era muy difícil, entre el calor, la humedad y el nivel. A mí esto aún me viene un poquito grande», ha añadido la atleta onubense, quien ha explicado: «He estado un poco más atrás de lo que esperaba, pero se ha hecho una carrera muy dura, desde el principio. He intentado luchar desde el principio yendo de menos a más a ver si me iba recuperando, pero mis piernas no han respondido».
A la lepera la participación en Pekín le sirve «para coger experiencia y confianza de cara al año olímpico». Sus dos compañeras de selección han entrado en meta por delante de ella. María José Poves fue décima (1:31:06) y Raquel González decimocuarta (1:32:00).
Laura García-Caro no pudo estar en el grupo de cabeza en ningún momento. China copó los dos primeros puestos para recuperar una hegemonía en marcha que no tenía desde 1999. El oro fue para Hong Liu, que en junio había batido el récord del Mundo en La Coruña. Esta vez hizo 1:27:45. La plata para su compatriota Xiuzhi Lu, que llegó junto a la ganadora, y el bronce para la ucraniana Olyanovska. La portuguesa Ana Cabecinha, que compitió junto a Laura García-Caro en el último Meeting Iberoamericano de Huelva, fue cuarta.
