Doble personalidad la que está plasmando esta temporada el conjunto aurinegro como local. Intensa primera parte donde los de Cándido Rosado mostraron calidad y ganas, terminando incluso estos 45 minutos iniciales con victoria en el marcador después de los tantos de Fran Lepe y Camacho, que hicieron olvidar la diana de Medina en el minuto seis.
La segunda mitad mostró el peor rostro de los leperos, físicamente muertos y desdibujados en el campo, no pudieron hacer nada ante las envestidas de los sevillanos, que se vieron en tablas gracias Serrano y por delante después de un magnífico remate en contraataque de Navarro. Este último tanto supuso el final de un encuentro que señala directamente a una plantilla joven que no está demostrando lo que sí hicieron en pretemporada, 21 tantos encajados en doce jornadas no supone ninguna broma. Cándido tiene mucho trabajo por delante.